QUE EL ÁNGEL DE LA JIRIBILLA LOS ACOMPAÑE.

viernes, 23 de noviembre de 2007

EL CASO DEL LIBRO DESAPARECIDO



La asociación NOVELPOL ha puesto en marcha un hermoso plan: liberar libros negro-policíacos en diferentes partes del mundo. Y les paso el chisme del que se va a liberar en México.

EL CASO DEL LIBRO DESAPARECIDO: JOY ANDA SUELTO

Me voy a amparar en dos razones para liberar este libro: una, que lo tengo repetido y, dos, que es muy difícil encontrarlo en México. Joy es la primera novela del escritor uruguayo radicado en Cuba Daniel Chavarría. Se considera la mejor obra policíaca publicada en la década de 1970-1890 en la isla caribeña. Y, sobre todo, como siempre, está llena de ese humor, tan cubano y característico de sus textos.
La novela será liberada el sábado 24, por la tarde, en la línea del metro que corre de CU a Indios Verdes –en México, D.F. Me sentiré muy contenta cuando la encuentres y la leas. Y si no te gusta, no la tires, por favor, el libro no tiene la culpa: sólo ponla a circular, una vez más. Hay alguien, por ahí, que te lo va a agradecer.

Si lo encuentras, sería muy bueno que nos dejaras un mensaje en esta nota. Así sabremos dónde y cuándo lo vas a soltar de nuevo. Sólo eso.

YAMILET GARCÍA ZAMORA

viernes, 16 de noviembre de 2007

DOS POEMAS, POR YAMILET GARCÍA ZAMORA

Nunca me he considerado poetisa, muy al contrario, mis poemas son escasos y nada buenos. Se pueden salvar, quizás, dos o tres. Soy, definitivamente, narradora, cuentista de pura cepa. Pero hoy me tomo el atrevimiento de subir dos poemas: el primero, escrito en México y el segundo, un viejo poema realizado en Cuba.


Mi amante hurga la razón del tiempo
Triste en la penumbra, me tiende el infinito
Sus manos se hunden
me asesina la nada
Mi amante de ojos sin despertares
Me desnuda de vicios
me prostituye de insomnios
Soy la novia fugaz que siembra espacios inconclusos
Mi amante es el ángel de la perdición perenne
Es mi amado no amado de caminos sin salida
Quiero sus brazos
la triste parsimonia de los tozudos
Me destroza el alma
no supo el cuerpo
Sus dedos trazaron dársenas en mi sexo
Es mi musa sin destino
sin castigo
Mi amante sin labios despierta mi lengua
Me intuye en las palabras
me extravía en el deseo
Yo soy otra en los instantes de su lucidez
Otra que escapa entre sus piernas insumisas
No puedo revelarle el camino
Sólo es mi amado sin tiempo y sin retorno
Alguien que abre puertas sin saberlo
Yo tomo el sonido de los goznes
silencios del amor acorralado
Lo extravié una tarde sin nombre
Naufragó entre cuerpos sin futuro
Mi amante de pesadillas sin noches
Almohadas desabridas de amores frustrados

“ INTERROGANTE DE LOS ESPEJOS “
La última interrogante de los espejos
asalta los cuerpos
alguien puede abrazar sortilegios
apresarlos entre ramas transparentes
ahora sólo hay necesidad de sosiego
cruzar la próxima aventura que se esconde
siempre
una doble interrogante tras los espejos
no reflejes un movimiento definitorio
las flores ya no abren a las caricias
la ternura es la búsqueda inmediata de lo inapresable
algo nuevo en cada resquicio
no rompas las esperas explorando el germen
en nosotros está la semilla
todo oculto a la espera
a la nueva canción que nos surca de imágenes
de cada ceniza brotarán melodías
cuerpos a la caza del postrer aliento
cuántos anhelan el final conjugado
nada es infalible en esta apocalipsis
el amor suele jugar sus perfectos remates
mi cuerpo es sólo un violín sin sustos
repleto de perplejidades

viernes, 9 de noviembre de 2007

De los cronopios oscuros ( SEGUNDA PARTE)

Hada Urbana( México, D.F, 1986) es una voz muy peculiar dentro de los cronopios -y no sólo por ser la única mujer. Sus textos fluctúan entre la realidad más descarnada y la poesía, navegando por temas filosóficos en ocasiones. Pese a su corta edad, muestra un dominio muy prometedor de la palabra. Hoy comparto con uds. un breve texto, desgarrador por su contenido y en el que subsiste, no obstante, un hálito poético y nostálgico que estremece.

Castillos y dragones.
POR: HADA URBANA.

Mariana llora todas las noches cuando su padre, invadido de alcohol, la golpea hasta caer inconsciente. Ella escapa a su cuarto, pone el seguro a la puerta —por si él llega a despertar— y se refugia en el pequeño espacio que hay entre su cama, un buró de madera y la pared color pastel de su habitación.
Las lágrimas han recorrido su rostro casi tantas veces como el incontable número de gotitas saladas que ahora la asfixian; con cada una de ellas va perdiendo su infancia, se le va escapando la vida.
Permanece con las piernas recogidas contra su pecho. Soba sus heridas y las baña con su dolor salado hasta que poco a poco ella misma se va engañando; se deja convencer por la idea optimista de su inocencia: “mañana papá volverá a prometerme, cuando regrese de la escuela, que no va a tomar más, pero mañana será cierto.” Con este consuelo se va adormeciendo. Se acurruca ahí mismo para sentirse más segura y sueña, sueña con castillos sobre montañas, palacios en las nubes, vuela montada sobre amigables dragones rojos de cuernos afilados y piel rugosa; sueña con un príncipe que la quiere y protege aunque en su fantasía no haya madrastras malvadas, hechiceras tétricas o monstruos; y Mariana sonríe cuando su príncipe le promete ser feliz con ella, por siempre y para siempre.

Despierta. Quiere seguir soñando. No desea ir a la escuela porque sabe que tendrá que inventar más excusas, más historias... Se levanta. Suspira. Va a clases.

Hoy soñará con el mito de los finales felices. Quizá mañana el azar esté de su lado y ella ya no despierte.

sábado, 3 de noviembre de 2007

De los cronopios oscuros de Casa Lamm (PRIMERA PARTE)

Bajo seudónimo -porque así lo quieren ellos- les presentaré textos de mis queridos cronopios. Ellos son -y lo digo muy orgullosa- mis alumnos, aprendices de escritores que prometen mucho, dada su edad. Laranjinha nació en el D.F, en 1982. La prosa de hoy hace referencia al ídolo de la juventud universal, el Ché Guevara. Desde una mirada posmodernista -el fin de las utopías, la caída de los fetiches y la humanización de los héroes- Laranjinha indaga en lo que pudo suceder si la historia hubiera sido otra. Su obra es, pues, una interrogación actual y muy interesante de ese sueño que se llama Cuba desde la óptica de la juventud, más allá de la Isla, que se cuestiona la persistencia de los cánones impuestos. Y los que conocen a Laranjinha, como yo, saben que el Ché es más que su heterónimo y que lleva a Cuba en la sangre.

Dr. Guevara
MI HETERÓNIMO
( Por Laranjinha)
In Memoriam Dr. Guevara
En días recientes este diario publicó la desafortunada noticia de la muerte del Dr. Ernesto Guevara de la Serna. Tuve oportunidad de conocerlo personalmente hace algunos años y mantuve, con relativa frecuencia, contacto con él. A manera de homenaje, me permito reproducir en esta columna la entrevista que me concedió, hace cerca de un año, con motivo de su más que merecido reconocimiento por parte de la Organización Mundial de la Salud, por su labor en el tratamiento e investigación de la lepra; especialidad a la que se abocó desde muy joven, cuando aún cursaba la carrera de medicina. Como siempre sucedía en nuestras pláticas, la charla giró inevitablemente a la política; tema que le apasionaba tanto o más, que la medicina.

Laranjinha.- En su diario de viaje sudamericano con Alberto Granado, usted, en el leprosario de San Pablo, Perú, menciona en un discurso: “…la división de América en nacionalidades inciertas e ilusorias es completamente ficticia. Constituimos una sola raza mestiza que desde México hasta el estrecho de Magallanes, presenta notables similitudes etnográficas” ¿Un médico multi homenajeado de 79 años, sigue pensando como aquel joven de 24?
Che.- Sí…, sí y cada vez me convenzo más de ello. Existen fronteras diluidas en el mundo globalizado; pero las fronteras sociales, económicas, políticas y, en mi caso, de salud, existen, y están bien implantadas de México a Argentina o como lo podemos ver en África o en las tres europas: occidental, central y del este. Aunque también tengo mi parte global, los principales problemas de la lepra en el mundo: desinformación y prejuicios.
L.- ¿Sigue declarándose comunista?.
Che.- No, de hecho nunca lo fui. En aquellas épocas, cuando llegué aquí a México, que andaba de fotógrafo-esposo-viajero-guerrillero, me definía más bien como socialista, que no es lo mismo que comunista.
De manera utópica sigo pensando igual, pero la vida, la madurez, la sistematización que han hecho los años, me hacen ver lo idílico que resulta una sociedad sin clases sociales; además, sería yo un pésimo ejemplo: trabajo en un hospital y en fundaciones privadas, doy conferencias en el corazón capitalista, mis hijos van a escuelas privadas, vivo en una residencial exclusiva… aunque tal vez sea el estar dentro de todo ello lo que me hace declararme con más fervor como socialista. Conozco al monstruo por dentro.
L.- ¿No se contradice, Doctor?
Che.- No necesariamente. No dejo de luchar desde mi posición por una sociedad más justa. Si la vida te da una situación cómoda, aprovéchala, disfrútala, pero que no por ello pierdas el deseo de justicia. No se necesita ser pobre para tener conciencia social.
L.- ¿Cómo ve Cuba actualmente?
Che.- Bipolar. No me sorprende lo de Fidel, desde que lo conocí aquí en México le ví grandes dotes de líder y con hambre de poder. Fue una de las cuestiones que me hicieron dudar aquella noche… Cuba cuenta con áreas muy positivas, como educación y alfabetización, medicina, deporte; pero ¿qué tan válido es que sean líderes en América Latina en estos aspectos si se pisotean los derechos humanos? ¿Si la cultura está supeditada a gritar loas al régimen? ¿Si una persona está por cumplir 50 años en el poder? ¿Si el consumo de carne, leche, jabones, gasolina e infinidad de productos tan básicos para nosotros están racionados? Claro, está el bloqueo; yo creo que Estados Unidos no ve que el bloqueo le da la excusa perfecta a Fidel para seguir en el poder. Si se acaba el bloqueo, hay dos escenarios: o Cuba se abre por necesidad al capitalismo y lo abraza o, lo que veo más factible, que se le acaba a Castro la excusa y la gente se harta aún más. En cualquier escenario, a la larga, Cuba no se sostendrá eternamente así. Es retrasar lo inevitable. Se acaba el bloqueo, se acaba Fidel.
L.- ¿Se arrepiente de no haber subido aquella noche al Granma (sic) con Fidel para iniciar la Revolución?
Che.- En sí dejé que el azar lo decidiera: tardé demasiado en encontrar mi inhalador contra el asma y al tratar de alcanzar a mis compañeros, me convencí de lo inútil de la lucha. Y me regresé.
¿Realmente pensábamos cambiar al mundo? Probablemente ahora ya estaría muerto y olvidado. No sé… tal vez hubiera sido mejor en el sentido de que, a pesar de estos homenajes, reniego del culto a la personalidad, al mito... es como si el capitalismo me hubiese engullido y ahora mi cara estuviera en pósters, playeras, tazas, pulseras con alguna frase épica. A un guerrillero socialista argentino de Cuba… eso sí sería contradictorio.

Hasta siempre, Doctor…